​Los vecinos dicen que fue a eso de las cinco de la madrugada cuando comenzaron a escuchar un ruido extraño que alteró la tranquilidad del descanso. Al levantarse se percataron que era la rotura de una matriz y el agua corría por las calles. Peor fue el despertar para Lidia Palavecino, quien a sus 89 años vio angustiada como el agua ingresaba a su vivienda. Una situación que fue en todo caso rápidamente subsanada desde Esval, que a través de una cuadrilla limpió y secó el lugar, entregando el apoyo necesario a la mujer. Pero esa si bien fue la consecuencia más grave, no fue la única y es que la rotura obligó a un corte del suministro en un vasto sector de villas Sarmiento y Los Acacios, dejando incluso sin posibilidad de funcionar, al Jardín Infantil emplazado en el lugar. Frente a esta situación, nos contactamos con Esval desde donde se indicó que el problema surgió por la gran cantidad de raíces que envolvieron e hicieron presión en las tuberías, debiendo realizar trabajos de emergencia y apoyando a la comunidad afectada con el recorrido de camiones aljibe. Al mismo tiempo, indicaron que el servicio comenzó a normalizarse de manera paulatina a partir del mediodía.