El propio Ministro de Salud había reconocido que por tratarse de una variable muy contagiosa, era casi imposible que no llegara a Chile, y así fue. El pasado jueves el Secretario de Estado informó que la variante Delta del coronavirus fue conformada en una mujer chilena de 43 años de edad, proveniente de Estados Unidos. Frente a esto, las alertas aumentan en frontera. En el caso del Complejo Los Libertadores, uno de los pasos más importantes y con mayor tránsito de carga internacional, se redobló la cantidad de funcionarios y se aumentó la realización de test de antígenos a fin de detectar a tiempo los casos positivos de covid19, más aun considerando que en Argentina, también se han confirmado varios casos de esta nueva y peligrosa cepa.

La variante Delta es una cepa con mucha mayor complejidad, es el doble de contagiosa y además tiene ciertas características que podría confundir a la población en general. Por ejemplo la sintomatología es muy similar al resfrío común donde hay romadizo, dolor de cabeza, garganta y fiebre. La posibilidad de enfermar más gravemente también es mayor y afecta mayormente a personas de cincuenta años hacia abajo. Frente a esta variante, también surge la duda de la efectividad de las actuales vacunas.

Lo que se plantea por parte del Colegio Médico es que exista una rigurosidad mayor en el aislamiento, que haya un seguimiento y una estrategia más estricta para evitar el ingreso de esta variante por las fronteras.

 En el caso de Los Libertadores, hay dos situaciones. Una es con los transportistas que en el caso de dar positivo al test de antígenos son enviados a residencias sanitarias en Aconcagua, mientras se espera el resultado de los estudios para establecer la cepa. En cuanto a los argentinos residentes en Chile o chilenos que regresan desde el vecino país que den positivo, son encapsulados en sus propios vehículos particulares a una residencia sanitaria exclusiva dispuesta en Viña del Mar.