Obispo de San Felipe lamenta dictamen del Vaticano
Lamentando lo ocurrido con el ahora ex párroco Mauricio Cruz Lolas, el obispo de la Diócesis de San Felipe, Gonzalo Bravo explicó que la decisión de quitarle el ministerio Sacerdotal es una medida ejemplar para todos los sacerdotes. Especialmente considerando que el afectado fue investigado dos veces por mala administración de los recursos, siendo el ultimo caso cuando era párroco de la Iglesia Santa Rosa.
Recordar que en el 2019 se presentó la primera denuncia por mala administración y gestión de los recursos durante el período que fue Párroco de San Esteban, juicio que terminó en que no había pruebas suficientes para comprobar los hechos.
Por de pronto, Cruz Lolas deberá abandonar la casa eclesiástica donde vivía actualmente y además ya no contará con la ayuda económica que hasta ahora era beneficiado.
