El general Max Jiménez, jefe de zona de la Región de O’Higgins, anunció la baja de cinco funcionarios de Carabineros implicados en el robo a la empresa de valores Brinks, ocurrido el 16 de agosto en Rancagua. En una conferencia de prensa conjunta con la Fiscalía, Jiménez calificó el incidente como de “extrema gravedad” y subrayó que Carabineros de Chile no tolerará comportamientos delictivos en sus filas. “Carabineros está comprometido con la seguridad de la comunidad y no aceptará personas que se alejen de su doctrina, menos aún delincuentes dentro de la institución”, afirmó. A pesar de la presión, Jiménez descartó renunciar a su cargo, defendiendo el trabajo realizado por las unidades de investigación del OS9 y del Departamento de Asuntos Internos (DAICAR). Finalmente, el general destacó la rapidez del operativo, que resultó en la detención de siete participantes en el robo, elevando a más de 20 los detenidos hasta la fecha. “Gracias a este despliegue operativo, hemos podido recopilar importantes antecedentes sobre la presunta participación de estos excarabineros”, aseguró Jiménez, reiterando su compromiso con la transparencia y la ética en la policía.
La Parroquia Nuestra Señora de La Asunción de Los Andes fue víctima de otro robo, pero esta vez afectando a uno de sus elementos más emblemáticos. Desde ambas campanas, ubicadas en el frontis del recinto, fueron sustraídos dos badajos de metal de aproximadamente 5 kilos cada uno, afectando completamente el funcionamiento de estas piezas, las que tienen un profundo valor histórico para la parroquia y la comunidad. Estas campanas, datan de mayo de 1896, representando un patrimonio significativo que ha sido parte importante de la vida religiosa de Los Andes por más de un siglo. Es así, como este incidente, se suma a una serie de robos que ha afectado a la parroquia en diversas ocasiones durante el trascurso del año, incluyendo hurtos en el comedor de la institución. La comunidad y trabajadores de la parroquia lamentan esta situación, puesto que solo se dedican a entregar ayuda a quienes más lo necesitan. Si bien, la parroquia cuenta con sistema de seguridad, señalan que este deberá ser complementado con cámaras prontamente, para así evitar este tipo de situaciones que finalmente podrían repercutir en el cierre definitivo del comedor solidario que allí se encuentra. Por su parte la iglesia espera que estos elementos puedan ser devueltos y hacen un llamado a la comunidad a estar atentos y reporten cualquier intento de comercialización de los badajos sustraídos.
La madrugada de este viernes, la Cooperativa Sanfecoop de la comuna de Los Andes ubicada en calle Maipú con Freire sufrió un robo frustrado que afectó su normal funcionamiento de atención durante la jornada. Fue alrededor de las 4 de la mañana, cuando la Central de Comunicaciones de Carabineros recibió una alerta sobre un incidente en el local. Al mismo tiempo, el Gerente del recinto fue alertado por la empresa de alarmas que monitorea el establecimiento. Los delincuentes ingresaron al local a través de un forado de aproximadamente 50x50 cm realizado en el techo del inmueble, destruyendo inmediatamente las cámaras de seguridad. Sin embargo, al percatarse de que la alarma se había activado, decidieron huir antes de lograr sustraer objetos de valor. El hecho continúa siendo investigado por la SIP de Carabineros de la Tercera Comisaría de Los Andes, por lo que, hasta el momento, no hay detenidos ni sospechosos identificados en relación a este delito, aun cuando las diligencias se mantienen a fin de dar con la identidad y paradero de los responsables.
Detectives de la Brigada Investigadora de Robos San Antonio de la Policía de Investigaciones de Chile detuvieron a tres personas, todas integrantes de una organización delictual que ingresó a un inmueble ubicado en el fundo Miltil en Cartagena, con la finalidad de robar especies. Según lo informado por la PDI, los imputados habrían realizado diversos ilícitos con similares características, en que irrumpían en domicilios premunidos con armas de fuego y a rostro cubierto y una vez dentro de éstos, golpeaban y maniataban a sus víctimas, con la intención de sustraer dinero y especies de valor. En los delitos cometidos, lograron robar diversas especies tecnológicas y junto a ellas, cuatro vehículos, con los que posteriormente se dieron a la fuga en dirección desconocida. El trabajo de análisis criminal e inteligencia, desplegado por los efectivos de la policía civil, permitió localizar a los imputados y además recuperar especies asociadas a los ilícitos, las que se encuentran avaluadas en 25 millones de pesos y que fueron devueltas a sus propietarios. Por instrucción del Ministerio Público, los imputados fueron puestos a disposición del Juzgado de Garantía de San Antonio para ser formalizados.
Durante el último tiempo, el robo de accesorios de vehículos ha presentado un alza en la ciudad de Los Andes, provocando esto un gran dolor de cabeza para las autoridades y es que se trata de un delito muy fácil de prevenir. Es que este tipo de hechos es consecuencia de aquel dicho que reza “La ocasión hace al ladrón”. Basta con darse una vuelta por el centro de la ciudad y mirar los vehículos estacionados. De diez, al menos cinco tienen especies en su interior y a la vista, algunos con las puertas mal cerradas y otros con las ventanas semi abiertas. Un delito que ocurre a cualquier hora del día y afecta principalmente a personas que dejan sus vehículos estacionados en zonas alejadas y con poco movimiento. Uno de esos lugares es la calle de servicio a un costado del Centro Comercial de avenida Santa Teresa, donde casi a diario, delincuentes rompen vidrios y roban especies. En ese lugar en específico existe prohibición de estacionar por lo que desde Carabineros se está trabajando en conjunto con el municipio a través del departamento de gestión de tránsito y Seguridad Pública para instalar señalética en toda la extensión de la calle para dejarla libre. Junto con esto, se generará un proceso informativo para los automovilistas que aparcan ahí, pues se estima que, en un par de semanas, se comiencen a cursar infracciones y citaciones al Juzgado de Policía Local.
El general Max Jiménez, jefe de zona de la Región de O’Higgins, anunció la baja de cinco funcionarios de Carabineros implicados en el robo a la empresa de valores Brinks, ocurrido el 16 de agosto en Rancagua. En una conferencia de prensa conjunta con la Fiscalía, Jiménez calificó el incidente como de “extrema gravedad” y subrayó que Carabineros de Chile no tolerará comportamientos delictivos en sus filas. “Carabineros está comprometido con la seguridad de la comunidad y no aceptará personas que se alejen de su doctrina, menos aún delincuentes dentro de la institución”, afirmó. A pesar de la presión, Jiménez descartó renunciar a su cargo, defendiendo el trabajo realizado por las unidades de investigación del OS9 y del Departamento de Asuntos Internos (DAICAR). Finalmente, el general destacó la rapidez del operativo, que resultó en la detención de siete participantes en el robo, elevando a más de 20 los detenidos hasta la fecha. “Gracias a este despliegue operativo, hemos podido recopilar importantes antecedentes sobre la presunta participación de estos excarabineros”, aseguró Jiménez, reiterando su compromiso con la transparencia y la ética en la policía.
La Parroquia Nuestra Señora de La Asunción de Los Andes fue víctima de otro robo, pero esta vez afectando a uno de sus elementos más emblemáticos. Desde ambas campanas, ubicadas en el frontis del recinto, fueron sustraídos dos badajos de metal de aproximadamente 5 kilos cada uno, afectando completamente el funcionamiento de estas piezas, las que tienen un profundo valor histórico para la parroquia y la comunidad. Estas campanas, datan de mayo de 1896, representando un patrimonio significativo que ha sido parte importante de la vida religiosa de Los Andes por más de un siglo. Es así, como este incidente, se suma a una serie de robos que ha afectado a la parroquia en diversas ocasiones durante el trascurso del año, incluyendo hurtos en el comedor de la institución. La comunidad y trabajadores de la parroquia lamentan esta situación, puesto que solo se dedican a entregar ayuda a quienes más lo necesitan. Si bien, la parroquia cuenta con sistema de seguridad, señalan que este deberá ser complementado con cámaras prontamente, para así evitar este tipo de situaciones que finalmente podrían repercutir en el cierre definitivo del comedor solidario que allí se encuentra. Por su parte la iglesia espera que estos elementos puedan ser devueltos y hacen un llamado a la comunidad a estar atentos y reporten cualquier intento de comercialización de los badajos sustraídos.
La madrugada de este viernes, la Cooperativa Sanfecoop de la comuna de Los Andes ubicada en calle Maipú con Freire sufrió un robo frustrado que afectó su normal funcionamiento de atención durante la jornada. Fue alrededor de las 4 de la mañana, cuando la Central de Comunicaciones de Carabineros recibió una alerta sobre un incidente en el local. Al mismo tiempo, el Gerente del recinto fue alertado por la empresa de alarmas que monitorea el establecimiento. Los delincuentes ingresaron al local a través de un forado de aproximadamente 50x50 cm realizado en el techo del inmueble, destruyendo inmediatamente las cámaras de seguridad. Sin embargo, al percatarse de que la alarma se había activado, decidieron huir antes de lograr sustraer objetos de valor. El hecho continúa siendo investigado por la SIP de Carabineros de la Tercera Comisaría de Los Andes, por lo que, hasta el momento, no hay detenidos ni sospechosos identificados en relación a este delito, aun cuando las diligencias se mantienen a fin de dar con la identidad y paradero de los responsables.
Detectives de la Brigada Investigadora de Robos San Antonio de la Policía de Investigaciones de Chile detuvieron a tres personas, todas integrantes de una organización delictual que ingresó a un inmueble ubicado en el fundo Miltil en Cartagena, con la finalidad de robar especies. Según lo informado por la PDI, los imputados habrían realizado diversos ilícitos con similares características, en que irrumpían en domicilios premunidos con armas de fuego y a rostro cubierto y una vez dentro de éstos, golpeaban y maniataban a sus víctimas, con la intención de sustraer dinero y especies de valor. En los delitos cometidos, lograron robar diversas especies tecnológicas y junto a ellas, cuatro vehículos, con los que posteriormente se dieron a la fuga en dirección desconocida. El trabajo de análisis criminal e inteligencia, desplegado por los efectivos de la policía civil, permitió localizar a los imputados y además recuperar especies asociadas a los ilícitos, las que se encuentran avaluadas en 25 millones de pesos y que fueron devueltas a sus propietarios. Por instrucción del Ministerio Público, los imputados fueron puestos a disposición del Juzgado de Garantía de San Antonio para ser formalizados.
Durante el último tiempo, el robo de accesorios de vehículos ha presentado un alza en la ciudad de Los Andes, provocando esto un gran dolor de cabeza para las autoridades y es que se trata de un delito muy fácil de prevenir. Es que este tipo de hechos es consecuencia de aquel dicho que reza “La ocasión hace al ladrón”. Basta con darse una vuelta por el centro de la ciudad y mirar los vehículos estacionados. De diez, al menos cinco tienen especies en su interior y a la vista, algunos con las puertas mal cerradas y otros con las ventanas semi abiertas. Un delito que ocurre a cualquier hora del día y afecta principalmente a personas que dejan sus vehículos estacionados en zonas alejadas y con poco movimiento. Uno de esos lugares es la calle de servicio a un costado del Centro Comercial de avenida Santa Teresa, donde casi a diario, delincuentes rompen vidrios y roban especies. En ese lugar en específico existe prohibición de estacionar por lo que desde Carabineros se está trabajando en conjunto con el municipio a través del departamento de gestión de tránsito y Seguridad Pública para instalar señalética en toda la extensión de la calle para dejarla libre. Junto con esto, se generará un proceso informativo para los automovilistas que aparcan ahí, pues se estima que, en un par de semanas, se comiencen a cursar infracciones y citaciones al Juzgado de Policía Local.